El presidente del Cabildo pide al Estado que las corporaciones insulares puedan hacer uso del superávit, aunque alerta de que no será suficiente para atender la realidad financiera de estas instituciones
Curbelo recuerda que las administraciones canarias han cumplido con las tareas presupuestarias
El presidente del Cabildo de La Gomera ha valorado, este lunes, el acuerdo adoptado por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) sobre la propuesta del Ministerio de Hacienda para disponer de los 14.000 millones de euros de los remanentes de las administraciones locales, por lo que el Estado les compensará con 5.000 millones de euros a fondo perdido – 2.000 millones en 2020 y 3.000 en 2021 -, mientras que el resto será devuelto en diez años, a partir de 2022.
“Este es un acuerdo que puede ser bueno para ayuntamientos y diputaciones peninsulares que no han cumplido con la tarea económica, pero no es el mejor para Canarias. Aquí la gran mayoría de las instituciones hemos cumplido con la regla de gasto y estabilidad presupuestaria”, aseguró Casimiro Curbelo, quien recordó la postura contraria mostrada por los ayuntamientos y cabildos de las islas a la propuesta debatida por la FEMP.
El dirigente gomero pidió al Estado que, visto el acuerdo alcanzado, se permita a los cabildos canarios disponer del superávit, aunque alertó que para algunas de las corporaciones insulares no será suficiente. “Habrá que echar mano de los remanentes y deberían permitirnos también el endeudamiento, aunque intuyo que esta última parte no llegará”.
Curbelo hizo especial énfasis en la delicada situación económica que tienen los cabildos con la caída de ingresos procedentes del Régimen Económico y Fiscal (REF) y que limita la capacidad presupuestaria de estas instituciones. “Nuestras singularidades se reflejan en un sistema de financiación con apenas capacidad recaudatoria, por lo que somos de las administraciones más afectadas”, reconoció.
El acuerdo de la FEMP incorpora a las administraciones locales en el reparto de los fondos de reconstrucción procedentes de la Unión Europea, además de la disposición de 400 millones de euros para suplir los déficits en transporte urbano. “Este parte tiene especial interés, pero ahora habrá que ver de qué forma se articula y cómo llegará a cada una de ellas”, aseveró.