Nueva Canarias solicita a Hacienda que vuelva a la mesa de diálogo con los titulares municipales de los remanentes y el dinero ocioso en los bancos
Nueva Canarias (NC) se ha alineado, de “manera incondicional”, con el rechazo unánime de la Federación Canaria de Municipios (Fecam) a la propuesta de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, sobre el uso del superávit y los remanentes para afrontar las secuelas del coronavirus. Los nacionalistas progresistas hicieron un llamamiento a la responsable ministerial para que vuelva a la mesa de diálogo con los titulares de un dinero ocioso en los bancos, que espera por la autorización del Gobierno estatal.
El presidente de NC, Román Rodríguez, y el portavoz parlamentario, Luis Campos, rechazaron la propuesta para que los ayuntamientos del Estado inviertan sólo 5.000 millones de euros en tres áreas muy concretas, como la agenda urbana española y movilidad sostenible, los cuidados de proximidad y la cultura.
Para Román Rodríguez, es una iniciativa “desproprocionada e injusta” ya que los “dueños del dinero”, que en Canarias se eleva a 3.200 millones de euros sumados los fondos de los cabildos insulares, tendrán “algo que decir sobre lo que se hace con sus recursos”. Luis Campos denunció que es “muy centralista, condicionada y totalmente insuficiente”.
“Falla la generosidad” del Ejecutivo estatal, criticó el portavoz parlamentario. Para los nacionalistas progresistas, las “formas también hay que cuidarlas” en situaciones complejas y difíciles como la crisis provocada por la pandemia del coronavirus. La “cicatería” de la titular de Hacienda no es justificable ni entendible, en opinión de Campos.
Los 3.200 millones de euros de los ayuntamientos y los cabildos, añadió el presidente de NC, son “vitales” para que las administraciones locales canarias puedan restituir la pérdida de ingresos. “Apropiarse de recursos ajenos”, y hacerlo además “sin tener en cuenta las demandas” de sus titulares, “nos posiciona de manera incondicional” con la Fecam, y a la espera de conocer la “letra chica” de las negociaciones en curso con la Federación Canaria de Islas (Fecai), advirtió Campos.
Al igual que el Gobierno canario obtuvo la autorización de Montero para usar su superávit y sin imposiciones sobre las áreas a invertir, Campos reclamó la misma consideración para las administraciones municipales e insulares de Canarias y del resto del Estado.
El presidente aludió a la posibilidad de “llegar a un acuerdo” al mismo tiempo que el portavoz parlamentario emplazó a Montero a volver a la mesa de diálogo. Campos puso como ejemplo el acuerdo alcanzado por el Consejo Europeo sobre el fondo de recuperación, donde “se ha impuesto el diálogo a la insolidaridad de unos pocos” después de cinco días y cuatro noches de negociaciones.
Tras reconocer el “enorme” esfuerzo del Ejecutivo estatal para responder a las necesidades sociales y económicas generadas por esta crisis, “muy distinto” a los recortes de 2008, Nueva Canarias volvió a apelar a la solidaridad al mismo tiempo que solicitó abrir nuevos cauces de negociación para decidir el uso de unos fondos destinados a responder a las diversas y singulares situaciones provocadas por la pandemia en cada uno de los municipios y las islas del Archipiélago.